Bienvenido (a) !!!

Hola! Nos da un gusto increible que nos visites, que esta página ayude en tu crecimiento personal y espiritual, estamos a tus órdenes, no olvides dejar tus datos y nosotros nos comunicaremos contigo, que la gracia de mi Padre celestial esté sobre ti y te haga brillar en medio del lugar y personas con las que te encuentres, nosotros como tu: Estuches de Jesús...



lunes, abril 26, 2010

SARMIENTOS FRUCTÍFEROS

Hubo una vez un niño que había perdido todo en la vida, sus padres habían muerto, era hijo único, no conocía a familiar alguno, en una ocasión, vagando en la calle, pidiendo para comer, llegó con una mujer, esta mujer se veía diferente a muchas mujeres en la ciudad, y le pidió dinero para poder comer, esta mujer, motivada por la compasión, le ofreció llevarlo a un lugar donde vendieran comida y así ella le podría dar de comer, el niño aceptó, lleno de alegría acompaño a la mujer y en el transcurso de ese rato la mujer comenzó a preguntarle sobre su vida, el niño, con lágrimas en los ojos le contó una parte de su historia, la mujer se dio cuenta que el niño se encontraba solo en la vida y llena de amor, le ofreció un trato al niño, el niño, entusiasmado escuchó con mucha atención, la mujer le dijo: si tu quieres, puedes venir a vivir conmigo, pero tendrás que ser muy obediente y educado, harás todo lo que yo te diga, y vivirás en la forma en la que yo te diga. El niño se espantó, pues muchos en la calle siempre trata de abusar de la gente, en esta misma forma, el niño creyó que esta señora se quería aprovechar del niño; la señora al ver la intranquilidad en el rostro del menor, la señora le dijo que no le haría daño, que en el momento en el que él quisiera se podía ir, que ella solo le ofrecía una vida llena de crecimiento y calidad para su vida, el niño, temeroso al principio aceptó y se fue con la señora. La señora al llegar a su casa, le compró ropas nuevas, le baño, le dio de comer, la arregló el cabello, y ordenó a los sirvientes que estaban en la casa de la señora, que trataran al niño como a un hijo de ella misma, los sirvientes extrañados, obedecieron la voluntad de la señora, al final del día, después de haberle cambiado la vida al niño, la señora le dijo al niño, que mientras el permaneciera viviendo en esa casa, siguiendo las reglas de la casa y siendo obediente a la buena voluntad de la señora, el niño siempre tendría sustento, protección, un lugar donde vivir, alimento que comer y educación, su vida sería prosperada y su camino sería recto.

El Señor Jesús, nos ha hecho una invitación similar a la que acabamos de leer en la vida de este niño, en nuestras vidas, hubo un momento en el que nos sentimos perdidos, solos, abandonados, sin objetivos en el mundo, sin un rumbo fijo y así nosotros hemos aceptado el vivir bajo su cuidado y protección, la condición no la muestra en el libro de Juan 15:1:17

SARMIENTOS FRUCTÍFEROS
(permaneciendo en la voluntad de dios)

Permanecer: mantenerse sin cambios en un mismo lugar, estado o condición.

En el verso uno y dos del capítulo quince, encontramos una explicación en concreto de lo que Jesús quiso mostrarnos, por medio de una parábola, lo que significa nuestra vida en el Señor Jesús, nuestra vida en ocasiones puede llegar a tener conflictos, pruebas, luchas y necesidades, ahora veamos los elementos involucrados en la empresa del Señor, reconociendo estos elementos, nosotros podremos permanecer en la voluntad del padre.

1. El primer elemento que encontramos en la lectura es:

La Vid verdadera – Jesús

Jesús es el tronco, la parte que da vida a toda la planta, la parte que nos llena de nutrientes y sustento en nuestra vida espiritual en donde están sujetos todos los sarmientos. Aquí llegamos al segundo elemento.

2. El segundo elemento que encontramos son:

Los sarmientos (ramas) – nosotros

Nosotros, nuestra vida, está reflejada en los sarmientos, estamos unidos al tronco y somos elemento de cuidado para el agricultor, el agricultor nos llena de atenciones y provee lo necesario para poder ser productivos, acá llegamos aun tercer elemento.

3. El tercer elemento que encontramos es:

El Agricultor – El Padre, Dios.

Dios es el creador, el que sembró la viña, el que hizo que todo fuera posible y el que cuida de su viñedo, cuida de nosotros, ¿para qué? bueno pues como en todo viñedo, para llevar buen fruto y tener uvas excelentes, acá llegamos al siguiente elemento.

4. El cuarto elemento que encontramos es:

El viñedo – el pueblo santo de Dios

El viñedo que Dios a plantado es la creación de un pueblo santo, que sirva para llevar los propósitos del Padre, estos son, llevar buenos frutos y el que lleva buenos frutos es por que permanece en el tronco, permanece pegado a Jesús, el que lleva buenos frutos será prosperado, pero el que no lleva buenos frutos será desechado, pampano que no lleva fruto, es cortado.

5. El quinto elemento que encontramos es:

El fruto – nuestras buenas obras

Nosotros reflejamos nuestras buenas obras en pensamiento, actitud y acciones, que le dan la gloria al Padre, ¿Cómo damos gloria al Padre? Haciendo que Él sea reconocido, exaltado, glorificado, amado, alabado, adorado. Las cosas que nosotros hacemos de nuestra vida, son los frutos que llevamos como sarmientos, en ellos se refleja si tenemos buenos frutos o si llevamos malos frutos, o si simplemente, no llevamos frutos. Y si no llevas buen fruto, como dice la escritura, serás cortado y echado en el fuego.

Nadie quiere ser cortado, por que el que es cortado, deja de tener vida, y el que deja de tener vida, muere y se vuelve basura y la basura es echada al fuego.

El Señor Jesús nos llama amigos si nosotros hacemos lo que Él manda. ¿cómo podemos mantener esa relación de amistad? El secreto está en cumplir con los mandamientos que Él nos dio, y estos se resumen en uno, amándonos unos a los otros.

Conclusión: ¿Qué tipo de sarmiento eres? De los que lleva fruto, o de los que no se han preocupado por llevar fruto y de los que serán cortados, si amas al Jesús debemos amar a nuestro prójimo, amarnos los unos a los otros, este es el secreto para tener vida en Jesús, que nos amemos unos a otros, ¿tú, estas amando?

No hay comentarios: